Nunca
he sido buena en primaria, secundaria, en el colegio en general era una alumna
promedio pero que no resaltaba demasiado. Debo admitir que lleve cursos de
verano un par de veces para poder pasar el año, me dedicaba mas al ocio y a
molestar a mis compañeros de clase, aunque odiara que ellos me molestaran. Era
llorona, susceptible, indecisa, colérica, quizás hasta ahora lo soy, debo
serlo.
Me
preocupo demasiado por ser tan pequeña en el mundo, me preocupo porque no
quiero ser una más de lo demás, una más que estudia periodismo, una mas que
tiene ilusiones de grandeza como todos
los demás.
Totalmente
voluble, bipolar quizás, puedo cambiar de actitud de un momento a otro o estar
triste un día entero, pensar una mañana entera en todo sin lograr hacer o
escribir nada.
Puedo
dejarme llevar por lo que digan los demás, quizás como ayer cuando alguien me
pregunto ¿de verdad te gusta el periodismo? Y no fue una pregunta cualquiera,
fue una pregunta con el sentido de estas realmente dispuesta a trabajar duro,
no tener días de descanso, ni beneficios, no ganar un buen sueldo por el simple
hecho de amor a la profesión. Esa era la idea que envolvía a la pregunta, esa
es la idea que todos tienen del periodismo, la idea de que periodismo es igual
a pobreza.
Ese
mismo día en la mañana leí un informe que presento la pagina web Clases de
Periodismo, el informe se llama Lo que ganan los periodistas en América Latina,
El Caribe y España. En general este informe no presenta datos muy alentadores como
para decir “estudia periodismo es la carrera del futuro” pues no. En el Perú el
50% de los reporteros ganan menos de 500 dólares, el 44.1% menos de 1000 dólares
y tan sólo el 5,9% ganan menos de 1500 dólares.
Por otro lado se presentan
testimonios como los siguientes dados
por periodistas peruanos: “En el Perú los sueldos de los redactores son paupérrimos, algunos no pasan de los 200 dólares, casi el básico. Y los
de medios digitales, con ciertas excepciones, van por allí. Además, la mayoría de los periodistas no tienen derechos laborales”, otro
testimonio “Mucho amor al arte.
Sueldos muy bajos y empresas muy explotadoras. En fin, el periodismo se lleva en las venas y nada como eso”
Me
quedo con el último testimonio “el periodismo se lleva en las venas” pues sí.
Mi
testimonio personal, para llegar a
decidirme a estudiar periodismo no fue nada fácil, en un principio no tenía en
la cabeza que terminaría estudiando esta carrera. Al salir del colegio lo único
que quería estudiar era pastelería, con todo el boom gastronómico que se
presento en el Perú por esos años mi cabeza giraba alrededor de la comida. Como
es muy común en la familia siempre se quiere que los hijos vayan a la
universidad, así que ingrese a la Pucp pero en estudios generales me cambie
tres veces de carrera, pase por administración, derecho y finalmente periodismo.
Sí periodismo una carrera no muy bien vista, una
carrera que suena a pasar el rato.
Las cosas
están claras para mí y sobre todo después de un largo día en el Coloquio de
Comunicaciones que se realizo en la Pucp.
Elegiste
esta carrea, porque te gusta, sientes pasión por ella, como dijo uno de los
ponentes “si estudias periodismo no esperes hacerte millonario” el periodismo es
muy lindo, encantador. El periodismo es difícil, tienes que luchar por un
trabajo, tienes que persistir, dar lo mejor de ti y aunque suene repetitivo
tienes que ser el mejor.
Las cosas
claras, el camino en esta carrera tendrá sus altas y bajas, dejemos de lado el
romanticismo pensando que al salir de la universidad tendrás miles de medios
que querrán contratarte, hay que construir desde ahora el camino para el
egreso.
Aunque en
un inicio me puse a cavilar ideas negativas sobre la carrera, ¿qué puedo hacer?
Es lo que me gusta, no me veo en otra cosa, no me imagino en algo diferente, después
de años de indecisiones llegue a esta decisión y no la cambiare.
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